
La estimulación cognitiva es una terapia no farmacológica que busca enlentecer el progreso de las enfermedades neurodegenerativas como el Alzheimer. A su vez, mejora la calidad de vida y es una estrategia que podemos integrar en el hogar.
Aquí presentamos algunos ejemplos de cómo hacerlo:
Memoria: La memoria suele ser una de las funciones más afectadas en las personas con Alzheimer. Estimularla puede ayudar a mantenerla en la medida de lo posible.
- Usar fotografías familiares u objetos significativos para hacer preguntas sobre recuerdos pasados. Por ejemplo “¿Quiénes están en esta foto?”.
- Repetir frecuentemente la información importante como nombres de familiares, la fecha, etc.
- Hablar de eventos significativos de su vida.
Atención: Suelen tener dificultades para mantener la atención durante períodos prolongados.
- Realizar actividades breves y variadas, como juegos de mesa sencillos.
- Fomentar tareas que requieran concentración durante un breve tiempo, como ordenar objetos, doblar ropa, etc.
- Crear un ambiente tranquilo y sin distracciones para mejorar la concentración.
Lenguaje: Las dificultades en el lenguaje son comunes, desde la pérdida de vocabulario hasta la dificultad para seguir conversaciones.
- Hablar de forma clara, pausada y con frases simples.
- Si es necesario, usar gestos y señas para reforzar lo que se está diciendo.
- Leer libros o revistas juntos, comentando lo que se lee.
- Realizar ejercicios simples como completar frases o palabras.
Funciones ejecutivas: capacidades como la planificación o la toma de decisiones se ven afectadas a medida que avanza la enfermedad.
- Realizar actividades simples de planificación, como hacer la lista de la compra.
- Ayudarles a organizar tareas del hogar, como poner la mesa.
Percepción y Orientación: La percepción visual y la orientación espacial también pueden verse alteradas, dificultando tareas cotidianas.
- Organizar el hogar de manera que los objetos estén siempre en el mismo lugar para ayudar a la persona a orientarse mejor.
- Proponer actividades como rompecabezas para estimular la percepción visual y la coordinación motora.
Al integrar estas actividades de manera regular en el hogar, podemos ayudar a retrasar la progresión de los síntomas y mejorar el bienestar general de nuestro familiar.
Neuropsicología Alzheimer Tierra de Barros