Un nuevo estudio publicado en el The Lance Neurology discute, por primera vez, si los distintos tipos de pruebas de imagen cerebral realmente funcionan para detectar el Alzheimer y si es cierto que pueden predecir cuál va a ser el progreso de la enfermedad.
Los resultados muestran que se debe mejorar la exactitud de las RM cerebrales. Uno de los autores del estudio, la profesora Chris Fox, afirma que el abuso de las RM cerebrales puede provocar unos costes sanitarios innecesarios para el NHS (Servicio Británico de Salud [National Health Service])mientras que estas pruebas causan una carga para el paciente al provocar estrés y ansiedad.
Según Chris Fox, los avances tecnológicos en la investigación por las técnicas de imagen revelan que la enfermedad tiene un progreso muy lento y al mismo tiempo, los cambios cerebrales pueden ser detectados antes de que la enfermedad se manifieste clínicamente.
El estudio concluye con unos resultados no muy prometedores ya que ningún método actual es suficientemente sensible y exacto para poder ser utilizado en la asistencia sanitaria primaria. Es imprescindible poder contar con biomarcadores de diagnóstico con una sensibilidad superior al 90% y una especificidad alrededor del 100% para que la prueba pueda ser fiable.