El pasado 12 de noviembre se celebró en todo el mundo el Día contra la Neumonía.  La neumonía, también conocida como pulmonía, es una enfermedad que provoca la inflamación de los pulmones por la presencia de una infección producida por virus o bacterias.

 España es el tercer país de la Unión Europea con mayor índice de neumonía y el número de casos va en aumento porque en la mayoría de las ocasiones se le considera un resfriado común y cuando por fin es diagnosticado de forma correcta, ya es demasiado tarde. Más del 40% de los enfermos de neumonía, con edad superior a 65 años, acaba presentando algún tipo de complicación que obliga a su ingreso en hospital.

Entre el 21% y el 54% de los ancianos que sufren neumonía tienen el riesgo de una menor esperanza de vida. Por eso esta celebración es tan importante para concienciar a la población sobre los riesgos de esta patología y su elevado índice de mortalidad, sobre todo entre la población mayor de 65 años.

La causa más frecuente de neumonía es por infección bacteriana, aunque en personas mayores se suela dar con bastante frecuencia la neumonía por aspiración, porque se inhala alimento, líquidos, vómitos o secreciones desde la boca hacia los pulmones.

Los síntomas más comunes de neumonía son:

- Tos, en ocasiones acompañada de secreciones amarillentas o verdosas o incluso moco con sangre

- Fiebreque puede ser baja o alta

- Escalofríoscon temblores

- Disnea, es decir Dificultad para respirar

- Dolor de cabeza

- Falta de apetito, baja energía y fatiga

- Dolor torácico agudo o punzante que empeora en una inspiración forzada o con la tos

En los enfermos de Alzheimer nos encontramos que aumenta la desorientación y la intranquilidad.

Ante la sospecha de que lo que nos encontramos no es un simple resfriado es importante acudir al médico, para que mediante auscultación o radiografía puede establecer un diagnostico precoz.

¿qué podemos hacer en casa?

Parece una medida muy simple, pero es esencial beber mucha agua para lograr fluidificar el moco y que no se acumule. Se debe prestar especial atención a la alimentación en los pacientes con dificultades de deglución para evitar neumonía por aspiración.

La fisioterapia respiratoria en nuestros enfermos de alzhéimer es muy importante para evitar la acumulación de moco en las bases pulmonares y la infección del mismo. Al igual que facilita la tos y la movilización de las secreciones.

Marina Preciado Hortigón (Fisioterapeuta  Centro de Día de Alzhéimer “Tierra de Barros”)