Este es uno de esos artículos relacionado con el mal del olvido, al que es importante darle difusión, ya que hace hincapié en una de las claves fundamentales para trabajar y abordar este tipo de patología de la forma más eficaz posible en cuanto al tratamiento con el enfermo y sus cuidadores.
Es una forma más de explicar que el tratamiento integral de la enfermedad, en todos sus ámbitos, en todo su espectro sindrómico, es la única manera fiable, hoy por hoy, de enlentecer la progresión del deterioro en la medida de lo posible, teniendo en cuenta a cada enfermo, claro está.
Es decir, no basta solo con medicar, o solo con hacer ejercicios de estimulación cognitiva, o solo con hacer trabajos de fisioterapia, es necesario trabajar de forma conjunta, hacer un plan de tratamiento integrador, donde todas las disciplinas médicas, psicoterapéuticas y sociales estén a disposición del enfermo y su familia para hacer más lenta y menos agresiva la enfermedad.
Si trabajamos de forma aislada, por ejemplo prescribiendo únicamente medicamentos, dejando todo el día al enfermo en casa sin hacer nada, la enfermedad avanzará a la velocidad de la luz, será más agresiva, más mordaz en su velocidad y mucho más dura de sobrellevar tanto para quien la padece como para los que cuidan.
En resumen, la calve está en trabajar de forma multidisciplinar y conjunta para que el tratamiento contra las demencias degenerativas sea, en último término, lo más efectivo posible.