El alzheimer es una enfermedad que, a día de hoy, no tiene cura. Recientes estudios han demostrado, incluso, que antes de que aparezcan los primeros síntomas en una avanzada edad, se va acumulando en el cerebro desde los 20 años.
Un equipo de investigadores de la Universidad de Queensland, en Bisbane, Australia, han decidido experimentar con un nuevo tratamiento que, en los primeros estudios realizados en ratones, ha dado buenos resultados. Según lo que han publicado esta semana en Science Translation Medicine, el 75% de los animales tratados dejó de mostrar daños en el tejido cerebral.
Lo interesante del estudio no es sólo la paralización del avance de los daños de la enfermedad, sino que los ratones mostraron recuperación de la memoria, lo que comprobaron a partir de realizar distintos ejercicios como el recorrido de laberintos.
El tratamiento que han empleado los científicos consiste en la estimulación de las células microgliales, que forman parte del sistema inmunológico del cerebro y se encargan de absorver placas de amiloides, que están asociadas a enfermedades neurodegenerativas como el alzheimer).
A pesar de los buenos resultados, antes de pasar a ensayos con humanos los científicos deberán aplicar el tratamiento en ovejas. Los primeros ensayos clínicos con personas llegarán varios años más tarde.