Ayer miércoles celebramos una de las tradiciones más antiguas y de mayor arraigo en Almendralejo, LA FIESTA DE LAS CANDELAS.
Una costumbre de la capital de Tierra de Barros en la que los vecinos de “nuestro pueblo” hacen “pantarujas” que después son quemadas en una pira hecha a base de troncos de madera y los sarmientos secos de los olivos de nuestra tierra. La “quema” es un acto que simboliza la forma de desterrar de nuestras vidas todo lo malo, lo que nos hace sufrir, lo que nos produce daño, para dar paso a lo positivo que nos pueda deparar la vida.
En esta ocasión nuestros usuarios, junto con todos los trabajadores del centro, hemos elaborado nuestra particular pantaruja para representar nuestra propia lucha diaria contra la epidemia de salud más cruel del siglo XXI, la enfermedad de alzhéimer.
Y es precisamente eso lo que hemos pretendido quemar, a esa enfermedad ladrona de vida, que deja a los enfermos y sus familias sumergidos en la derrota, la tristeza, el desaliento y la pena.
Ojalá el fuego purificador aleje para siempre esta terrible enfermedad, dando paso a tratamientos eficaces para la misma.
