Pintar y reconstruir una obra del artista Luis Seoane es la propuesta con la que la Asociación de Familiares de enfermos de Alzhéimer de A Coruña (Afaco) cerró ayer su último taller creativo en colaboración con el Museo de Belas Artes de la ciudad. Esta actividad forma parte de Retazos de la memoria, un programa orientado a disminuir el aislamiento y la pasividad de los afectados por la enfermedad de Alzheimer y aumentar su grado de socialización a través del arte. Ambas entidades colaboran en este proyecto desde el pasado mes de enero.
Con el objetivo de fomentar el trabajo cooperativo y la coordinación entre miembros de un mismo grupo, los participantes pintaron con colores planos distintos tramos del cuadro Figuras que después unieron en un rompecabezas.
La logopeda de Afaco y coordinadora de esta actividad, Nerea Rey, señala que, en ocasiones, los afectados por demencias son reticentes a relacionarse con su entorno. "A medida que avanza la enfermedad, se niegan a hacer cosas", afirma Nerea. "No obstante, la sociedad suele achacar que son ellos quienes se aíslan, pero también lo hacemos nosotros", añade. Por ello, la asociación organiza estos proyectos orientados mayoritariamente a personas cuya enfermedad se encuentra en fase inicial.
El Museo de Belas Artes de A Coruña, a través del responsable de su Departamento de Difusión y Acción Cultural, Manuel Mosquera, acogió esta iniciativa para ofrecer la posibilidad de "intercalar los talleres plásticos con las visitas" a las instalaciones. Se crea, así, un marco propicio para que los afectados por enfermedades neurodegenerativas potencien su capacidad de trabajo en grupo y la implicación activa en este tipo de actividades.
Mosquera y Rey coinciden en que el balance inicial es positivo y avanzan que se buscará la "consolidación de una relación estable y periódica" entre ambas entidades, que a partir de septiembre realizarán una evaluación de los resultados y retomarán las actividades conjuntas.
Afaco se constituyó en 1995 con el objetivo de prestar formación y asesoramiento legal, jurídico y económico a las familias con miembros afectados por demencias. Hoy en día trabaja también con los enfermos a través de sus talleres de estimulación, terapias de reminiscencia, musicoterapia y de su centro de día. El proceso de incorporación a esta asociación comienza en el momento en que una familia demanda asesoramiento. Después, se requiere un diagnóstico médico al cual se añade una evaluación realizada por la propia Afaco. Finalmente, el paciente comienza un tratamiento no farmacológico individual y personalizado en función del proceso de su enfermedad.
Fuente:laopinioncoruna.es