El artículo que os presentamos a continuación es un ejemplo más de la importancia de la alimentación sana y equilibrada para prevenir la aparición del mal de alzhéimer o al menos para retrasar sus síntomas y es que una dieta, denominada con el acrónimo MIND (mente), podría llegar a reducir de forma significativa el riesgo de aparición del mal del olvido, aunque la dieta no se siga de forma rigurosa y estricta. Estos resultados se han publicado recientemente en la revista “Alzheimer and Dementia”, perteneciente a la Asociación del Alzheimer estadounidense.
Esta dieta, es una combinación de la dieta básica mediterránea y una dieta para la hipertensión y contiene principalmente vegetales, nueces, bayas, judías, cereales integrales, pescado, aves de corral, aceite de oliva y vino.
Ojalá seamos cada vez más consientes de la importancia de los hábitos de vida saludable en la prevención de las enfermedades degenerativas y en la mejora de la calidad de vida.