¿ES UN DESPISTE O ALGO MÁS GRAVE?
Los pequeños olvidos son una respuesta natural al proceso del envejecimiento, y a menudo cuesta diferenciarlos de un principio de demencia.
En general no es preocupante olvidar el nombre de un conocido, un cumpleaños, una cita, una palabra o dónde están las llaves del coche por ejemplo. A todos nos han ocurrido estos olvidos alguna vez. Pero si los despistes se hacen cada vez más usuales pueden estar indicando que algo va mal. Es importante tener en cuenta el tipo de despiste. No es lo mismo olvidarse el nombre de un compañero de colegio al que hace años que no ves que de cómo se llama un compañero de trabajo con el que hablas habitualmente.
Además de los olvidos hay que fijarse si se acompañan de otros signos de alerta que podemos relacionar con el deterioro mental, como por ejemplo:
- Cambios de conducta.
- Pérdida inexplicable de peso.
- No encontrar habitualmente las palabras a la hora de expresarte.
- Pérdida de olfato.
EJERCICIO 157:
Descubre qué número es el que continúa cada serie en el menor tiempo posible…
EJERCICIO 158:
Lee con atención y memoriza estas instrucciones durante unos minutos, luego tápalas e intenta recordarlas para saber cuál de los dibujos corresponde a las instrucciones que has memorizado.
- Empieza en el Nº5.
- Gira a la izquierda.
- Luego gira hacia abajo.
- Luego gira a la derecha.
- Luego gira hacia el Nº3.
- Luego gira hacia abajo.
- Luego gira a la izquierda.
- Vuelve al Nº5.
