Y así la celebración de la chaquetía se convirtió en un ejercicio de reminiscencia estupendo, un momento distendido de buenos recuerdos y de charla amena, además de endulzarnos un ratito la mañana.
Os recomendamos siempre seguir una dieta adecuada baja en grasas y azucares, pero un bollito de todos los santos no es mal modo de hacer una excepción