¿Quién no ha hecho alguna vez algún cuadernillo rubio? Seguro que todos en nuestra infancia hemos rellenado alguno, siempre había que practicar caligrafía, y es que la marca creada por Ramón Rubio en 1956 ha ayudado a muchos niños a mejorar la escritura y las matemáticas, y
En la actualidad la Fundación Cuadernos Rubio edita y comercializa una serie de cuadernos de estimulación tanto cognitiva como física, para que muchos de los niños que se beneficiaron de ella, hoy como adultos puedan trabajar en casa con facilidad si presentan algún tipo de deterioro cognitivo. La colección se divide en dos:
1.Estimulación cognitiva:
La colección de estimulación cognitiva contiene actividades encaminadas a reforzar, preservar, potenciar y lograr una mejora del rendimiento cognitivo en distintos ámbitos: lenguaje, memoria, cálculo, lectura y escritura, atención-concentración, praxias y gnosias.
La distribución por niveles atiende a un grado de dificultad decreciente:
- Nivel 1: Indicado e ideado para ser utilizado por personas sin deterioro cognitivo y para personas con deterioro leve.
- Nivel 2: Ideado para ser trabajado por personas con deterioro cognitivo leve-moderado.
- Nivel 3: Indicado en situaciones de deterioro moderado grave.
2.Estimulacion de destrezas motoras finas:
La colección está indicada en contextos terapéuticos y programas de intervención para personas que presenten dificultades, déficits o alteraciones en la psicomotricidad fina; los ejercicios están enfocados a tratar y retrasar la aparición de manifestaciones motoras o síntomas como: Micrografía, Bradicinesia (enlentecimiento), alteración de la motricidad fina, rigidez o temblor en reposo.
Fuente: www.cuadernosrubio.net
Marina Preciado Hortigón (Fisioterapeuta Centro de Día de Alzhéimer “Tierra de Barros”)
