Después de todo lo descrito en el post anterior, queremos compartir con vosotros una observación. Ya os he comentado cuanto me había gustado el corto de Pedro Solís “Cuerdas” y decidí que lo veríamos después de la sesión de relajación en sala multisensorial que hacemos todas las semanas.
Puede parecer fuera de lugar, pero nosotros en la estimulación multisensorial incluimos la estimulación de un sexto sentido, los sentimientos. Además de usar el oído, gusto, olfato, vista y tacto, intentamos que en cada sesión, se despierte algo dentro de ellos, no buscamos despertar solo sus cabezas sino también su corazón.
Resulta curioso, como a pesar de tener un final triste, al terminar solo recuerdan los gestos de María, como ella dedica su tiempo y su esfuerzo por conseguirlo las cuerdas y sobre todo la escena donde bailan los dos.
Sabemos que la memoria es selectiva y los recuerdos más, y tiene predilección por eliminar los malos recuerdos, por eso hacemos tanto hincapié en el cariño, el afecto y el amor, puede que nuestros enfermos no recuerden nuestro nombre ni quienes somos, pero sí recuerdan tu sonrisa, tus abrazos y tus besos
Marina Preciado Hortigón
Fisioterapeuta centro de día de Alzhéimer “Tierra de Barros”