• Secreción y goteo nasal.
• Tos.
• Fatiga.
• Dolor de garganta y de cabeza.
• Fiebre.
• Escalofríos y malestar general.
• Dificultad para respirar (disnea)

El problema viene cuando todo se complica y da lugar a una neumonía que es la primera causa de muerte por infección en España y genera cinco veces más víctimas que los accidentes de tráfico.

La neumonía es una afección respiratoria común en el invierno, y más aún en la población mayor de 65 años; se trata de la inflamación de los pulmones debido a infección. Presenta tos productiva y expectoración purulenta (con pus), fiebre y dolor torácico. Puede confundirse con el resfriado o la gripe, para un diagnóstico diferencial es importante hacer una radiografía de tórax.

Muchas veces una gripe se complica en neumonía debido al exceso de acumulación en las bases pulmonares, esto ocurre con más facilidad en pacientes que se mueven poco o encamados

En fases avanzadas del alzhéimer la capacidad de toser y de expectorar están disminuidas, hay pacientes que se les olvida toser, favoreciendo así el acumulo de secreciones y por consecuencia la neumonía.

Se puede prevenir manteniendo una higiene correcta, lavarse las manos con frecuencia (sobre todo al tocar superficies sucias) y evitar el contacto con personas afectadas.

La fisioterapia respiratoria en nuestros enfermos de alzhéimer es muy importante a la hora de prevenir la acumulación de moco en las bases pulmonares y la infección del mismo, al igual que una hidratación abundante y una correcta alimentación.

Marina Preciado Hortigón. Fisioterapeuta de Alzhéimer “Tierra de Barros”