Pero es precisamente ese esfuerzo por leer el que debemos conservar y mantener a lo largo de todo el proceso de estimulación durante la enfermedad debido a los inmensos beneficios terapéuticos que leer conlleva.
Por este motivo, compartimos el siguiente artículo, que recoge en sus líneas los innumerables beneficios que el hábito de la lectura aporta a los enfermos de alzhéimer, además de establecer una serie de consejos útiles para saber escoger la lectura o el libro a adecuado para el enfermo y la fase de deterioro en la que se encuentre.
Fuente: https://www.qmayor.com/psicologia/libros-demencia/