El Centro de Referencia Estatal de Atención a las Personas con Enfermedad de Alzheimer (CRE Alzeimer) ha ejercido este jueves como anfitrión para la presentación en rueda de prensa del ‘Estudio sobre la Creación de una Unidad de Calidad de Vida’ en dicho centro.

Para la puesta en marcha de este estudio, se desarrolló una Unidad de Calidad de Vida de atención, donde participaron como grupo experimental 8 personas diagnosticadas con demencia en un estado leve que vivían solos o con su familia y fueron trasladados a esta Unidad diurna, y por otro lado, un grupo control, compuesto por otras 7 personas con características parecidas en relación a la demencia, pero que permanecieron en su entorno, sin utilizar ningún recurso.

“Hasta ahora como habíamos trabajado era proponiendo un plan al paciente de lo que yo considero que necesita. Ya no. En esta unidad, ahora preguntamos a los pacientes qué es lo que a ellos les aporta calidad de vida”, explicó Lourdes Bermejo, directora del proyecto.

Según explicó, “la investigación ha consistido en analizar el funcionamiento de esta Unidad de Calidad de Vida durante 5 meses de su desarrollo, así como su impacto en las personas con demencia, en sus familiares, en los profesionales de la Unidad y en el propio Centro de Referencia.

Ante esto, César Antón Beltrán, director general del IMSERSO, se mostró satisfecho con los resultados obtenidos, pues según explicó, "las personas con demencia han evidenciado mejoras contrastadas en su bienestar social y emociona, su inclusión social, en sus capacidades funcionales y cognitivas y en su grado de autonomía".

“Hasta ahora se había hablado mucho de calidad de vida, ahora lo hemos contrastado. Hemos mejorado la calidad de vida y el bienestar a través de un modelo que se centra en la persona”, añadió.

La iniciativa además aporta conocimiento e información valiosa sobre cómo diseñar un recurso de atención diurna con propuestas organizacionales de entorno, de intervención y relación profesional, además de exponer cómo se puede ayudar a los familiares a tomar un papel activo que ayude a “vivir de la mejor manera posible” al enfermo.