El Litio, como muchos sabrán, es un mineral de origen natural, que desde los años 30 del pasado siglo, manifestó tener propiedades beneficiosas para el tratamiento de determinadas enfermedades mentales, más concretamente en los trastornos maníaco-depresivos.
Pero la historia de este mineral está llena de contradicciones y luchas económicas, ya que aunque han sido numerosos los especialistas que a lo largo de los años lo han defendido como medicamento, las farmacéuticas, al no poder patentarlo, ha creado una campaña de desprestigio del mismo, basándose en sus numerosos y devastadores efectos secundarios, efectos que por otra parte, son iguales o incluso menos dañinos que los fármacos sustitutivos del litio que ellas fabrican.
En fin, dejando aparte este doble rasero que, por desgracia, es una práctica común en el mundo, nos queremos centrar en lo realmente interesante e importante, en la posible eficacia de este mineral a la hora de tratar demencias degenerativas como el alzhéimer.
Está relación entre el litio y la prevención del alzhéimer no es nueva. Sin embargo, hasta hoy la evidencia clínica no ha comenzado a dar pistas concretas de que la comunidad científica podría estar cerca de un importante hallazgo farmacológico en este sentido.
Por esto os invitamos a que leáis el estudio pormenorizado que sobre el litio encontrareis en este extenso artículo, y descubráis los beneficios que, a pesar de las farmacéuticas, puede aportar a la lucha contra el mal del olvido.