Esta es la conclusión de un estudio de 2 años de duración llevado a cabo en la Universidad de California en Los Angeles, el cual analizó el perfil metabólico de 50 pacientes. El primer subtipo es el inflamatorio, caracterizado por valores elevados en la relación globulina / albúmina y en la concentración sérica de proteína C reactiva de alta sensibilidad.

El segundo es el no inflamatorio, en el que los anteriores marcadores presentan valores normales y que se caracteriza por resistencia a la insulina, hipovitaminosis D, hiperhomocisteinemia yreducciones del soporte hormonal. El tercero es el cortical y constituye una entidad clínica muy distinta a los anteriores, afectando mayoritariamente a individuos relativamente jóvenes sin polimorfismos relevantes en el gen ApoE4 y presentando afectación cortical, un rasgo inusual en la enfermedad de Alzheimer típica. Se caracteriza, además, por la presencia de discalculia y afasia y por una notoria deficiencia en zinc.

El Dr. Dale Bredesen, autor del estudio, ya había demostrado en el año 2014 que los cambios en el estilo de vida, el ejercicio y la dieta dirigidos a mejorar el metabolismo revertían el declive cognitivo en 9 de cada 10 pacientes en la fase temprana de la enfermedad o con declive cognitivo leve. Los actuales hallazgos han surgido de la evaluación extensiva de los datos de ese estudio y podrían ayudar a seleccionar los tratamientos adecuados para cada subtipo.