Cómo todos los años nuestro usuarios han hecho la tradicional visita a la cruz de Flora para conmemorar la celebración del mes de Mayo. Dicha visita forma parte del conjunto de actividades programadas por nuestro centro de día para celebrar el Mes de María, es en esta ocasión una actividad muy especial para nosotros, primero porque es una tradición que se lleva realizando durante años y nuestros “abuelos” disfrutan de una forma muy especial con ella por el simbolismo que representa y porque les hace vivir una experiencia nueva fuera del entorno habitual. Y segundo por la enorme acogida y el inmenso cariño que Flora, la señora encargada de realizar en su casa ese hermoso altar en honor a la Virgen María, tiene siempre para con nosotros y nuestros “abuelos” que se sienten muy a gusto con ella y sus enormes atenciones.
No es de extrañar que siempre que vuelven de ver el altar de Flora, una enorme sonrisa de alegría y satisfacción se dibuje en sus caras, porque ella les hace sentir el afecto y la ternura que tanto necesitan para saber que, a pesar de su falta de recuerdos, aún forman parte activa de la vida.
Un millón de gracias Flora por tu generosidad y tu entrega y por demostrarnos una vez más que nunca olvidas a los que ya no recuerdan.