La microbiota intestinal está en boca de todos, la población general, nutricionistas y científicos a partes iguales. A medida que se conoce más sobre la comunidad estable de microorganismos que reside en nuestro intestino, se encuentran vínculos antes impensables entre la flora del aparato digestivo y el bienestar general.

Una interesante investigación con población gemelar a hallado evidencias de que el consumo diario de alimentos prebióticos basados en fibras mejora el rendimiento cognitivo de la gente mayor de 65 años, posiblemente debido a que enriquece su flora intestinal.

La prueba cognitiva individual que tuvo una mejora significativa en los grupos de prebióticos versus placebo fue el número de errores en la prueba de aprendizaje de Paired Associates, que es una prueba de memoria particularmente centrada en la memoria visual y el nuevo aprendizaje. Esta medida también ha sido identificada como un marcador temprano de fenómenos patológicos como la enfermedad de Alzheimer.

En los últimos años se ha establecido el concepto de un eje intestino-cerebro, en el que la microbiota influye en las vías bidireccionales intestino-cerebro. Se cree que existen tres vías principales para esta comunicación bidireccional: neuronal, inmune y endocrina. De hecho, existe un creciente conjunto de pruebas que respaldan las intervenciones dirigidas al microbioma intestinal (incluidos los prebióticos) para mejorar la cognición.

Te dejo la lista de alimentos ricos en prebióticos por si los quieres implementar más en tus comidas diarias:  setas, ajo, espárragos, cebolla o cebolletas, cebada, avena, manzana, cacao, lentejas rojas, maíz, puerros, alcachofas, plátanos, miel, patata, batata y soja.

Fuente: https://www.nature.com/articles/s41467-024-46116-y?utm_source=beehiiv&utm_medium=newsletter&utm_campaign=la-triada-oscura-o-los-3-rasgos-del-lado-oscuro-humano

Rosa Ana García

Psicología Alzheimer