- Fatiga extrema
- Infecciones recurrentes en la piel, las encías o la vejiga
- Aumento de peso y obesidad en diabetes tipo II. La obesidad además afecta a los órganos internos. Los tejidos grasos del cuerpo producen compuestos químicos que aumentan la resistencia a la insulina. El corazón y los vasos sanguíneos se ponen tensos al esforzarse en bombear la sangre a través de una masa corporal mayor, además deben también enfrentarse a los químicos inflamatorios que producen las células grasas, aumentando así las enfermedades cardiacas, renales y las embolias.
- La artritis y la diabetes no están relacionadas directamente, pero las enfermedades a menudo coexisten, de hecho las estadísticas muestran que más de la mitad de las personas con diabetes también tienen algún tipo de artritis.
Recientes investigaciones también muestran conexiones genéticas entre la Artritis reumatoide y la diabetes tipo 1. En los últimos años, los científicos han identificado un gen llamado PTPN22 que se correlaciona fuertemente con la incidencia de la diabetes tipo 1 así como con la Artritis reumatoide, la artritis idiopática juvenil y otras enfermedades autoinmunes.
-La diabetes genera cambios musculo esqueléticos ocasionando síntomas como dolor y rigidez de las articulaciones; hinchazón; formación de nódulos bajo la piel, particularmente en los dedos, dedo en gatillo, síndrome del túnel carpiano y hombros dolorosos.
¿Qué podemos hacer para frenar estas consecuencias físicas nocivas?
El ejercicio regular, no solo ayuda a aliviar el dolor y a mejorar la movilidad de las articulaciones, sino que reduce los niveles de glucosa en la sangre y optimizar la capacidad del cuerpo de usar insulina.
El ejercicio aeróbico regular puede disminuir la tensión arterial, los niveles de colesterol y el riesgo de desarrollar enfermedades cardiovasculares, así mismo ayudan a dormir mejor, a controlar el peso y a mejorar su bienestar en general. La clave es empezar despacio e ir incrementando gradualmente la resistencia, media hora de paseo al dia y una pauta sencilla de ejercicios nos ayudara a mantener a raya esta enfermedad silenciosa.
Marina Preciado (Fisioterapeuta Alzhéimer “Tierra de Barros”)