- Derecho a la prevención de la enfermedad.
-A acceder a los servicios de salud que precise cada persona, sin discriminación en función de los recursos, lugar de residencia o enfermedad.
-A la información.
-Al consentimiento.
-A la libre elección.
-A la intimidad y confidencialidad.
-Al respeto del tiempo de los pacientes.
-Al cumplimiento de los estándares de calidad.
-A la seguridad.
-A la innovación.
-A evitar los sufrimientos innecesarios y el dolor.
-A un trato personalizado.
-A reclamar.
-A recibir compensación.

El Día Europeo de los Derechos de los Pacientes se creó para ayudar en este objetivo: informar, debatir y adoptar compromisos para mejorar los derechos de los pacientes en Europa, pero, ¿qué ocurre cuando nuestro paciente se encuentra con una demencia? ¿Si no está en condiciones de enterarse de su estado o de lo que le ocurrirá? Ni que decir tiene que esos derechos permanecen intactos aun cuando el sujeto no sea consciente de los  mismos, en este caso serán sus familiares responsables de luchar por ellos.

Hay un derecho que me gustaría destacar, quizás por ser el que parezca menos importante y el que en mayor caso se ve vulnerado, DERECHO AL RESPETO DEL TIEMPO DE LOS PACIENTES. Muchas veces nos encontramos ante enfermos que van un poco más lentos ( o bien por el avance de la enfermedad o debido a la medicación) en estos casos debemos respetar sus tiempos y permitirles que se valgan por ellos mismos sin meterles prisa o instigarles a que corran.

Añadiría otro derecho a la lista, algo fundamental: DERECHO A LA DIGNIDAD DE LA PERSONA. Nos olvidamos de ver al individuo que se esconde tras la enfermedad, no son solo enfermos de alzhéimer, quizás no sean capaces de recordar su nombre, o el día que es hoy, pero siguen siendo personas. No lo olvidemos nunca!

Marina Preciado Hortigón (Fisioterapeuta  Centro de Día de Alzhéimer “Tierra de Barros”)