Este es uno de esos testimonios que nos ayudan a comprobar cómo el amor hacia una persona enferma está por encima de parentescos de sangre, porque cuando alguien decide cuidar y ayudar a otro de forma incondicional, esa dedicación está por encima de cualquier vínculo familiar.
Y es que en el alzhéimer el mejor nexo de unión entre el cuidador y el enfermo es el afecto, independientemente de que sean familiares o no.
Fuente: https://www.alzheimeruniversal.eu/2017/02/13/porellavalelapenaluchar-cartas-del-alzheimer/