-Reduce el riesgo de sufrir hipertensión y ayuda al correcto funcionamiento del sistema cardiovascular, mejorando la circulación periférica y disminuyendo el edema en los miembros inferiores.
- Ayuda a controlar la obesidad y la diabetes tipo 2, mejorando los niveles de glucosa en sangre.
- Mejora el sistema osteoarticular, músculos y articulaciones aprovechan el descanso prolongado para disminuir la tensión acumulada durante la actividad diurna
- Mejora el ánimo, reduce la irritabilidad y el estrés.
Se ha demostrado que dormir menos de 6 horas es perjudicial para la salud, pero cuidado con dormir en exceso, ya que dormir más de diez tampoco es bueno, sobre todo en nuestros enfermos de alzhéimer, en los que una encamamiento prolongado puede producir aletargamiento, desorientación, retracciones musculares y ulceras de decúbito.
Marina Preciado Hortigón. Fisioterapeuta de Alzhéimer “Tierra de Barros”