Sabéis que desde nuestra web estamos siempre proponiendo ideas y consejos para mejorar vuestra salud y la de vuestros familiares, por eso esta semana, a petición de uno de nuestros socios, vamos a explicar cómo poder hacer ejercicio físico cuando se está en silla de ruedas.
Se tiene la creencia errónea de que cuando nuestro familiar deja de caminar ya está condenado al sedentarismo, y nada más lejos de la realidad porque el hecho de no caminar nos limita pero podemos y debemos seguir ejercitando nuestras extremidades, que son las que se encargaran de mantener una buena circulación periférica.
A continuación os mostramos 5 ejercicios muy sencillos para conseguir lo expuesto anteriormente. Para realizarlos podemos ayudarnos de aros, pelotas o cintas elásticas que además de hacer más amena la sesión de ejercicios también nos facilitaran la tarea:
- EJERCICIO 1: Cogemos un aro con ambas manos y estiramos los brazos hacia delante, y sin doblar los codos lo llevamos hacia arriba. Repetir el ejercicio diez veces
- EJERCICIO 2: Con una pelota, extendemos los brazos hacia arriba y describiendo un arco lo más amplio posible intentamos tocarnos los pies. Repetir el ejercicio 10 veces
- EJERCICIO 3: Lanzaremos la pelota hacia arriba. Repetir el ejercicio 20 veces
- EJERCICIO 4: Elevamos la rodilla ayudándonos de una cinta elástica que colocaremos debajo de la misma. (si no disponemos de banda elástica podemos usar también una venda elástica). Repetiremos el ejercicio 5 veces con cada rodilla
- EJERCICIO 5: Colocar la banda elástica debajo del pie y estiramos la pierna. Repetir el ejercicio 10 veces con cada pierna
Como podréis observar, los ejercicios no conllevan ninguna dificultad y se pueden hacer de forma sencilla y práctica con nuestros familiares.
Comenzaremos realizando una serie diaria para ir aumentando las sesiones progresivamente a dos veces al día e incluso, cuando nuestro familiar esté más entrenado, realizar dos series seguidas dos veces al día.
Cómo decimos siempre, ANIMO Y A TRABAJAR. Que nada frene las ganas de mejorar la calidad de vida de vuestros seres queridos.
Marina Preciado Hortigón (Fisioterapeuta Centro de Día de Alzhéimer “Tierra de Barros”)