Parece que por fin, el sol y las buenas temperaturas han llegado para quedarse, tras las copiosas lluvias nuestros parques y jardines están más verdes que nunca, sin duda es el momento idóneo para practicar shinrin-yoku, o lo que es lo mismo, un baño de bosque, una práctica japonesa para entrar en contacto con la naturaleza, dejarse envolver por el aire puro, olores, sonidos y colores que nos ofrece la tierra.
Los efectos de esta `terapia del bosque´ están siendo estudiados por el Gobierno japonés, después de estar en un entorno natural, las personas experimentaron un descenso de un 12,4% en el nivel de cortisol; un 7% en la actividad nerviosa simpática; un 1,4% en la presión arterial sistólica, y 5.8 % en la frecuencia cardíaca.
Pero no se queda ahí, el estudio Effect of forest bathing trips on human immune function (2010) demostró que tras un paseo, aumenta significativamente la concentración de células NK en sangre, y los niveles de proteínas anticáncer intracelulares, permaneciendo su efecto durante más de diez días.
Y es que muchos son los efectos positivos que obtenemos y encima es gratis. Así que no lo dudéis, buscad un buen parque y disfrutad del shinrin-yoku, pero cuidado que no se trata de una ruta de senderismo, sino que consiste en dar un paseo relajado, aun mas si te acompaña tu familiar enfermo de alzhéimer, os dejo algunos consejos útiles:
- Acude sin teléfono ni cámara de fotos, desconecta del mundo digital y disfruta en directo de la sesión de cromoterapia que te ofrece la gama cromática de la naturaleza,
- Disfruta del silencio y empápate de la Musicoterapia de los sonido naturales
- Viste con ropa adecuada a la época del año, lleva también una manta para poder sentaros y descansar en algún sitio, una vez sentados, practica ejercicios respiratorios, inspirando profundamente por la nariz y espirando por la boca de modo pausado, no solo limpiaras los pulmones sino que disfrutaras de la aromaterapia que te ofrece el campo
- No olvides el agua, la hidratación y más aun a estas temperaturas es esencial para todos, pero aún más en personas mayores
Nosotros por nuestra parte ya hemos empezado a disfrutar de nuestro hermoso patio, tanto los paseos diarios como las dos sesiones de gimnasia semanales se realizan al aire libre, al compás del cantar de los pajarillos.
Marina Preciado Hortigón (Fisioterapeuta Centro de Día de Alzhéimer “Tierra de Barros”)
