Jueves, 12 Noviembre 2015 09:02

UNA GRAN DESCONOCIDA, LA DEMENCIA POR CUERPO DE LEWY

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Hace unos días saltó a los medios de comunicación de todo el mundo la noticia inesperada de la causa o el motivo real por el que el archiconocido actor Robin Williams, decidió quitarse la vida. Según su esposa, el actor sufría una de las demencias neurodegenerativas más desconocidas, la demencia por cuerpo s de Lewy, prima hermana del alzhéimer, y con una sintomatología común el algunos aspectos, pero diferente en otros, al mal del alzhéimer.

Las dos son demencias neurodegenerativas y las dos, por desgracia, van aniquilando a la persona que las padece poco a poco, pero hemos creído necesario que conozcáis más a fondo este tipo de demencia, ya que es la tercera en incidencia tras el alzhéimer y las demencias vasculares. Esperemos que os resulte útil.

Tenía 63 años, una vida de éxitos cinematográficos, derrotas personales, igual número de victorias, dinero, fama y una enfermedad demasiado difícil; la demencia por cuerpos de Lewy. Aunque esto último nunca lo supo, los médicos solo pudieron emitir este  diagnóstico después de practicada la autopsia, como reconoce su esposa, Susan Schneider, en la primera entrevista que concede después del suicidio del actor, a la revista People.

Lo que sí sabía Williams, fue que su estado físico y mental deterioraba por días, que la ansiedad y la depresión lo paralizaban y que sus miembros tenían una rigidez que hizo pensar que el párkinson había llegado a su vida. Confusión diagnóstica habitual en la demencia con cuerpos de Lewy, que presenta síntomas típicos de dos de las enfermedades neurodegenerativas más frecuentes, la enfermedad de Parkinson y la enfermedad de Alzheimer. En el caso de Williams, se especuló que la depresión lo llevó al acto desesperado del suicidio el 11 de agosto de 2014, cuando lo encontraron con un cinturón atado a su cuello. Pero su esposa aclara:

“No fue la depresión lo que mató a Robin. La depresión fue uno de los 50 síntomas que tenía y fue pequeño. Experimentó ataques de ansiedad que lo paralizaban. Una vez, calculó mal al cerrar una puerta y acabó con la cabeza ensangrentada y rigidez muscular y era incapaz de decir qué le había pasado. Sin embargo, su equipo de médicos no pudieron identificar qué le pasaba hasta que le realizaron la autopsia.

La demencia por cuerpos de Lewy comienza a dar las primeras señales entre los 50 y los 85 años y, como otras enfermedades neurodegenerativas, no tiene cura y los síntomas empeoran con el tiempo. Ocurre cuando, por causas aún desconocidas, se acumulan en las neuronas unas estructuras de proteínas denominadas Cuerpos de Lewy cuyo componente fundamental es la proteína  α-sinucleína, pero que también contiene una cantidad importante de placas amiloides, una de las causas fundamentales de la enfermedad de Alzheimer. Entre los síntomas de la demencia con cuerpos de Lewy, destacan:

  • Problemas con la memoria, resolución de problemas, planificación y pensamiento abstracto o analítico.
  • Fluctuaciones cognitivas que involucran cambios impredecibles en la concentración y de la atención de un día para otro. 
  • Entre los síntomas similares a los de la enfermedad de Parkinson están la rigidez o un endurecimiento muscular, un caminar pesado, temblor y lentitud de movimientos.
  • Alucinaciones: la persona cree ver u oír cosas que no están realmente presentes.

Tratamiento para la enfermedad no existen, sino que se tratan los síntomas de forma independiente, los cognitivos con los medicamentos usados en la enfermedad de Alzheimer y los motores en ocasiones con los que se emplean en la enfermedad de Parkinson. El diagnóstico de la enfermedad es aún muy complejo, siendo, como ya hemos dicho, confundida muchas veces con párkinson o alzhéimer. Recientemente, un reconocido neurólogo norteamericano anunció la creación de un test que facilitaba el diagnóstico de demencia con cuerpos de Lewy y tenía una aplicación de alrededor de tres minutos.

También te puede interesar leer: Test LBCRS de Galvin: diagnosticar demencia con Cuerpos de Lewy.

Un pequeño paso en el camino de hacer visible la segunda causa de demencia después de la enfermedad de Alzheimer. Paradójicamente, un suceso trágico, como la muerte de Williams, ha logrado traer al conocimiento público el sufrimiento por el que atraviesan millones de enfermos y familiares que viven con esta enfermedad.  Ojalá no quede en mera atención mediática pasajera y se traduzca en mayor investigación y ayuda a los afectados por la demencia con cuerpos de Lewy.

 

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